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Presupuesto inteligente: un GPS para no perder el rumbo financiero

Si estás emprendiendo, entonces debes conocer cómo funciona un presupuesto, ya que te ayudará a gestionar mejor tu dinero, para que produzca y te ayude a crecer.

Tiempo de lectura: 2 minutos ⌚

Para hacer crecer tu proyecto, no solo necesitas tener un buen producto o servicio, sino también saber gestionar bien tus recursos.

Es allí donde el presupuesto se convierte en una herramienta crucial para mantener tu emprendimiento en marcha y asegurarte de que cada acción que tomes te acerque a tus objetivos.

Planificar tus finanzas de forma estratégica te ayudará a tomar decisiones más inteligentes.

¿Por qué debes tomar esto en cuenta?

Porque cualquier decisión puede impactar tu negocio, para bien o para mal, así que la sabiduría debe ser una muy buena compañera, ¿eh?

En este artículo, te enseñamos cómo crear un presupuesto paso a paso. Te darás cuenta lo positivo que es planteártelo, pero también llevarlo a la acción.

Entendiendo el presupuesto de tu emprendimiento 

Antes de comenzar, es fundamental comprender qué significa el presupuesto para tu emprendimiento. No se trata solo de sumar números en una hoja de cálculo.

Si se elabora correctamente, este se convierte en una suerte de mapa de ruta, para anticipar lo que sucederá.

El presupuesto de un emprendimiento permite hacer proyecciones financieras, dándote información clara y precisa sobre las oportunidades de crecimiento y expansión.

Imagina que tu proyecto inicia el año con una inversión de 6.000 dólares. A partir de ahí, identificas los gastos que tendrás en los próximos seis meses.

Después, analizas las ventas que podrías generar durante este tiempo, basándote en los resultados del mismo periodo del año anterior. Con toda esta información, puedes calcular tu capacidad de inversión y planificar nuevas estrategias o innovaciones para tu negocio.

Así como el GPS te dice dónde te encuentras en la actualidad, con total precisión, un presupuesto te marca el punto de partida, cada estación y cómo llegar al punto final que te has trazado.

Crea el presupuesto de tu negocio en 5 técnicas sencillos

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Ahora que sabes lo crucial que es tener un presupuesto para tu emprendimiento, es momento de aprender a hacerlo de manera simple y efectiva.

Aquí te dejamos 5 técnicas muy prácticas para que puedas crear el tuyo:

Evalúa tus ingresos

El primer paso para estructurar un presupuesto es entender cuánto dinero está ingresando. Analizar los ingresos de los últimos meses, preferiblemente de un año completo, te dará una visión clara.

Debes conocer todas tus entradas de dinero, es decir, todo loque ingresa por concepto de ventas, cesiones, comisiones, etc. Eso demuestra una parte importante del desempeño de tu emprendimiento.

Al hacerlo, no solo sabrás cuánto generas, sino que también identificarás ciclos de fluctuación en tus ventas. Por ejemplo, si tu negocio suele bajar sus ventas en ciertos meses, como en verano, podrás anticiparlo.

Esto hará que estés más que listo para esos periodos menos rentables, como reservar fondos o adaptar tus campañas, y así asegurar que el flujo de dinero siga siendo estable todo el año.

Calcula tus costos fijos

El siguiente paso para crear un presupuesto sólido es entender bien cuáles son esos gastos fijos que tu negocio necesita para funcionar todos los días.

Estos son los costos que se repiten mes a mes, como el alquiler, los sueldos, los servicios, y todo lo que es esencial para que tu emprendimiento siga operando.

Saber exactamente cuánto gastas en estos aspectos te da el control que necesitas. Así podrás planificar con claridad, evitar sorpresas y asegurar que tu negocio se mantenga estable mientras trabajas en su crecimiento.

Mapea tus gastos variables

Cuando estás gestionando tu emprendimiento, saber cuáles son tus gastos variables es esencial para mantener el control financiero. Estos suelen cambiar mes a mes, dependiendo de factores como la demanda o las temporadas del año.

Por ejemplo, si tu negocio depende de suministros o servicios extras, estos gastos pueden variar según el volumen de ventas.

Algunos de estos gastos son necesarios, pero otros son flexibles y puedes ajustarlos según lo que necesites en cada momento. Identificar cuáles son esos gastos opcionales te permite reducirlos o incluso eliminarlos cuando los ingresos bajan, lo que te da más margen para manejar tu flujo de efectivo de manera eficiente.

Haz un fondo de emergencia, para estar listo ante lo inesperado

Como emprendedor, sabes que las sorpresas siempre aparecen. Da igual si tu negocio está arrancando o si ya llevas un tiempo, los imprevistos siempre van a surgir.

Aunque en la vida no siempre estamos preparados, en los negocios sí podemos y debemos estarlo.

Cuando estés armando tu presupuesto, asegúrate de guardar un poco para un fondo de emergencia. Esto te ayudará a cubrir esos gastos inesperados sin tener que tocar el dinero que ya tenías destinado para lo esencial.

Así, no solo mantienes la estabilidad de tu negocio, sino que también te ahorras estrés cuando las cosas no salgan como esperabas.

Bye estrés, ¡hola planificación!

Construye el futuro de tu negocio con un buen presupuesto

Un presupuesto exitoso no solo cubre las necesidades de hoy, sino que también te prepara para el mañana. Piensa en ahorrar para futuras inversiones, planificar tu expansión y tener un fondo de emergencia listo para cualquier sorpresa que surja.

Un verdadero emprendedor no solo se enfoca en el día a día, sino que también tiene una visión a largo plazo para hacer crecer tu negocio de manera sostenible. Hacer un presupuesto no tiene por qué ser un desafío.

Recuerda que este es un aliado dinámico que debe ser revisado y ajustado regularmente, para asegurar que tu negocio se mantenga en el camino correcto.

¡No dejes de planificar el futuro de tu emprendimiento! Es, al mismo tiempo, tu proyecto de vida.

Si te interesan más temas como este, te invitamos a leer: ¡Mi negocio está generando ganancias! ¿Cuál es el siguiente paso?, Emprendedores: 7 consejos esenciales para equilibrar tu vida personal y profesional, ¿La tecnología puede mejorar la experiencia del cliente? La respuesta es: SÍ.

Escrito por: Catalina Hurtado

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